lunes, 27 de octubre de 2008

CAMINO Y REVIENTO



Camino. La peor película que he visto en mi vida.
Camino. Obra maestra.
Camino. Qué mal rollo.
Camino. Qué gran retrato del Opus.
Camino. Una estrella según nuestro experto.
Camino. Cuatro estrellas de la crítica.
O entras o no. Parece que no hay término medio. Yo me dejé llevar desde el minuto uno. Me pareció brillante, claustrofóbica, divertida, conmovedora (palabreja que detesto), dura, surrealista, desasosegante (no hace falta ser el malrollero y tramposo de Haneke para que la gente se revuelva en su asiento, incómoda).
A pesar de lo cual:
el final se le va de las manos
peca en algunos momentos de maniquea
acaba resultando excesiva
A pesar de lo cual:
la niña justifica por sí misma la película (por lo magnética que es y por el acierto de haber escogido a una niña de 12 años para representar lo irracional de las creencias cuando se llevan a sus extremos)
el retrato del Opus es implacable; el de la preadolescencia, perfecto
uno quiere que la vea todo el mundo por aquello del debate
Porque hay otro fundamentalismo religioso además del que todos nos sabemos ya, porque no resulta fácil abordar un tema como éste, porque la mayoría hemos recibido una educación religiosa y por tanto represora, porque se supone que la religión se inventó como alivio y no como sufrimiento, porque a posteriori todo es destripable (puede que Camino no aguante una disección rigurosa, puede que tenga muchos peros, puede que a ratos sea efectista, pero en el cine todo el mundo estaba a lo que estaba).

Y, notas a pie de página:
Pero, ay, al día siguiente de Camino, vi una de Monicelli en la Filmoteca. Y, bueno, viva la comedia italiana de los cincuenta. Sin malos rollos, ni dramas...
Volví a ver La estanquera de Vallecas. ¡Qué grande! ¡Y qué certero retrato de ese deporte nacional llamado linchamiento!

5 comentarios:

Alberto MATE dijo...

agree 100%
el tapir está al acecho,
bien!

Anónimo dijo...

Pero bueno! Quién ha decidido enriquecer con su exquisita prosa las aciagas tardes de las marujas de provincias!? Gracias al cielo...

El tapir Nicanor dijo...

he tenido que darme al blog, en vista de que mis amigos no querían ir a ver camino...

Ambrosius de Königsberg dijo...

No estoy bautizado,
y la religión nunca me ha rozado.

Lo único que se es que nunca he sentido tanto miedo como en la casa del pueblo, cuando tenía que pasar al lado de un Cristo de corazón sangrante.

por cierto, apúntante esta peli, aun sin distribuidor: la noche que dejó de llover

El tapir Nicanor dijo...

ambrosius, ¿no estás bautizado?
ahora sí que sopy fan...
la peli, ¿la distribuyes tú, bajo cuerda?
en caso afirmativo, ya estás pasándomela
o te requiso el último material...