Sobre películas de las que uno sale cabreado.
Me vienen a la memoria, así como las más recientes –que no las únicas, pero respetemos el sabio dictamen del recuerdo que sus razones tendrá-.
* "Quemar después de leer": muy mal. No hay ni una sola línea de diálogo brillante, ni un gag gracioso. Nada. Como si cuatro colegas se hubieran juntado para pasárselo bien. De eso va, ¿no? George, Ethan & Joel, Frances, John, Tilda y Brad pasándolo en grande. Yo no. Lo único: cómo masca chicle mister Jolie.
* "Hacia rutas salvajes": trufada de tópicos y de frases rimbombantes con supuesto mensaje... Y, ¿quién le dijo a Emile Hirsch que lo suyo era el cine? Si lo mejor que se puede decir de una película es que tiene una bonita fotografía, apaga y vámonos.
* "Asuntos privados en lugares públicos": tremenda, Cursi, almibarada, estúpida, aburrida. Infumable. Si hubiera leído la hojita de marras antes de entrar y hubiera sabido que el titulo original era "Coeurs" (Corazones), jamás me habrían pillado.
* "Cien clavos": no, no y no. Mal el simbolismo cristiano de tercera; mal las metáforas obvias; mal el lenguaje poético de baratillo; mal el pobre Raz Degan que de tan guapo parece sacado de un anuncio de colonia; mal el mensaje, simple hasta la extenuación (“Todos los libros del mundo no valen lo que un café con un amigo”). Hermano Olmi, ¡déjalo ya!
Notas a pie de página:
- Una que gusta más después que durante: "Tropic Thunder". Bien el falso tráiler de los curas (grande, grande Tobey Maguire), bien un enorme Robert Downey Jr. destilando negritud, bien el irreconocible Tom Cruise bailando como un temible rapero chuleta.
- Una que gusta durante y después: "Encuentros en el fin del mundo". Otro documental magnético, surrealista, freakie y delirante del tronado de Herzog. Inolvidable su escupida y castrense dicción que convierte el inglés en un dialecto del alemán.
3 comentarios:
escupe, escupe, escupeemeeeeee...
Añado a la lista la última de Woody Allen, Vicky Martín Berrocal (el tapir dixit).
Comedia hueca, de cartón piedra, sin una risa ni una mísera línea de diálogo brillante. Más falsa que la nariz de Ramoncín. El Bardem plano, la Cruz histérica, y la Johanson inane, cada vez más similar en prestaciones artísticas a la Pataky. Un bluff pese a la promoción y al millón de espectadores...
yo ni me molesté la verdad
miedito me dio sólo el tráiler
Publicar un comentario